A ti, oh Jehová, levantaré mi alma.
Sal. 25.1
En momentos así, levanto mi voz,
levanto mi canto a Cristo;
en momentos así, levanto mi ser,
levanto mi alma a él.
Cuánto te amo, Dios;
cuánto te amo, Dios;
cuánto te amo, Dios;
cuánto te amo, Dios.
LETRA Y MÚSICA: David Graham, 1948, es traducción.