Mirad, cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios. 1 Jn. 3.1
1- Ro. 8.1
2- Ap. 7.14
3- Lc. 19.10
C- Is. 49.22
Mirad cuál amor
nos ha dado el Padre
que seamos llamados
hijos de nuestro Dios,
ninguna condena
hay para los santos,
los que creen en Cristo
como su Salvador.
Todo aquel que a Cristo
quiere entregar su alma
hallará dulce calma
en los brazos de Dios.
Todo aquel que a Cristo
quiere entregar su alma
hallará dulce calma
en los brazos de Dios.
Gloriosa esperanza
a los redimidos
de encontrar a los suyos
en el seno de Dios,
allá en el cielo
estaremos reunidos
los lavados con sangre
derramada en la cruz.
Amigo, escucha
el llamado de Cristo
que te dice al oído:
“Ven a mí, pecador”,
acepta la gracia
del Hijo bendito
que en la cruz del Calvario
tu castigo llevó.
LETRA Y MÚSICA: Juan M. Isáis, arr. Javier Arjona G.